miércoles, 2 de marzo de 2011

[Joaquín López Dóriga. . En privado]



A lo largo del tiempo, Mexicana de Aviación, como en su momento Aeroméxico, fueron rescatadas una y otra vez por el gobierno, siempre con el dinero de todos los mexicanos, ante los fracasos administrativos y hasta fraudulentos de sus propietarios.

Detrás de esos ejercicios de socializar con dinero público las pérdidas privadas, hay historias negras sin aclarar y fraudes sin castigar.

Pero así se hacían las cosas. El gobierno rescataba a las empresas aéreas, las saneaba, las entregaba de nuevo a particulares que las quebraban para que el gobierno las volviera a rescatar, a sanear, a entregar y los mismos a quebrar para que el gobierno los salvara y mantener ese círculo perverso y corrupto.

Con la modernidad, ese inmoral práctica terminó: Aeroméxico, que dirige Andrés Conesa, fue adquirida por un grupo de inversionistas privados que la lleva con éxito, y Mexicana fue vendida a Grupo Posadas, de Gastón Azcárraga, que la quebró, vendió en mil pesos más sus millonarios pasivos, y se retiró con su estado de pérdidas y ganancias, dejando la empresa a la promoción del gobierno para construir acuerdos sindicales y de acreedores y animar a un comprador.

Todo se llevó a cabo en la oscuridad de estos casos, entre la penumbra y la sospecha.

Así, apareció una fantasmal Tenedora K, fondo sin rostro que se la vendió a otra firma no menos difusa, PC Capital, que se comprometió a pagar 11 millones de pesos por las acciones que se compraron en mil pesos y aportar 200 millones de dólares que en realidad irían 100 al pago de impuestos retenidos y no enterados a Hacienda y otros 100 al capítulo laboral, dejando la pregunta: ¿y cuánto a la empresa para echarla a volar? Nunca se especificó.

El plazo para pagar los 200 millones de dólares se venció anoche y PC Capital ni siquiera pagó los 11 millones de pesos por la compra de las acciones, dejando a la autoridad colgada en una operación envuelta en un gran engaño en el que se chamaquearon a Javier Lozano y, con él, a todo el gobierno y a todos los mexicanos.

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