Correo (también Periódico AM)
Género: Nota Informativa
Publicación: 27 de septiembre de 2011
Autor: Georgina Serrano / Ricardo Aguilar
A 12 años de la tragedia que enlutó Celaya, los deudos de las 71 víctimas de ese "domingo negro" y los más de cien lesionados siguen esperando justicia, ya que no han recibido la indemnización que les correspondía debido a que el proceso del caso se ha tornado lento.
NO OLVIDAN
Cerca de 200 personas acudieron a la misa realizada en la bodega donde se guardaba la pólvora para conmemorar la tragedia y exigir justicia
Ayer, con una misa realizada frente a la bodega donde se almacenaba la pólvora en forma ilegal, como ya se ha hecho costumbre, acudieron cerca de 200 personas para recordar a sus seres queridos.
Florencio López Ojeda, vocero del "Movimiento Ciudadano" surgido tras la tragedia, señaló que a 12 años esperan que la justicia se aplique, "pero ésta no aparece" ya que ha sido un proceso muy lento y que se ha entorpecido por los constantes cambios de Juez de Distrito, "llevamos cuatro jueces que mientras estudian el expediente se van y no se resuelve, han sido entre seis y ocho agentes del Ministerio Público encargado".
Por su parte el representante legal, Juan José Martínez Hernández, señaló que la única persona inculpada a la fecha es Angélica Vargas Bocanegra, propietaria de la bodega, quien fue sentenciada a 10 años con cuatro meses de prisión que cumple en el Cereso Mil de Valle de Santiago, de los cuales lleva por lo menos seis años y le falta cumplir la reparación del daño o indemnización a los afectados, deudos y lesionados, quienes sufrieron daños como consecuencia de la explosión.
Explicó que esto corresponde al Juez V de Distrito y se ha iniciado el trámite solicitándose a la Secretaría de Hacienda que requiera el pago a Angélica Vargas, ya que en su momento fueron incautados bienes debidamente registrados en el Registro Público de la Propiedad que aseguran 5.4 millones de pesos para cubrir las indemnizaciones.
Sin embargo lamentó que entre esos bienes esté la bodega donde se presentó el siniestro, que actualmente es ocupada por otros comercios, "no sabemos porque el ayuntamiento permitió que funcione, si es un bien incautado".
El vocero del "Movimiento Ciudadano" lamentó que en este tiempo haya fallecido Rodolfo Vázquez Galván, Serena Mancera y Juana Hernández Cabello, tres deudos que no alcanzaron justicia ni a recibir lo que les correspondería de indemnización.
"Ni a los policías, socorristas y voluntarios que acudieron y perdieron la vida se les ha dado la protección de las autoridades, y no han querido tomar en cuenta la creación de un fideicomiso para atender a las víctimas, además de una afrenta al permitir que las bodegas sean ocupadas por comercios, cuando la petición fue que al ser un espacio incautado se permitiera contar con un monumento, capilla o lápida con los nombres de los fallecidos como recuerdo".
No olvidan
Son las 09:20 de la mañana del 26 de septiembre era domingo y muchas personas iban a la Central de Abastos a comprar su mandado, pero una explosión interrumpió sus actividades y una segunda terminó con la vida de 72 personas y dejó varios lesionados.
J. Socorro Ortega corrió para alejarse del peligro pero de pronto sintió un golpe en el cuerpo y cayó, luego un amigo lo levantó y llevó al Seguro Social. "Con la segunda explosión vuelan muchas cosas, no se que me pega pero me arranca mis dos piernas".
Desde que ocurrió la primera explosión se activó la respuesta en Seguridad Pública, Bomberos y Cruz Roja, uno de los primeros en llegar fue Pedro Ávila, policía del grupo "Panteras", quien intentó resguardar el área y desalojar a las personas pero la segunda explosión terminó con su vida.
"Mientras uno esté de pie debe seguir en lucha, no dejar que las autoridades se olviden de esto (Domingo Negro), mi hijo tenía 20 años y al cumplir con su trabajo voló en pedazos.
El dolor todavía está aquí dentro (corazón) y no podemos permitir esta corrupción", palabras entrecortadas de Juana García, madre del policía caído en cumplimiento.
RECUENTO
La tragedia
- Antes de las 10:00 horas del 26 de septiembre de 1999 ocurrieron tres explosiones en la Abarrotera Celaya que dejó 71 muertos y 384 heridos
- Angélica Vargas Bocanegra, ya cumplió seis de 10 años de sentencia pero no ha pagado la indemnización a las víctimas
- En la zona fue aplicado el plan DN-III para realizar labores de rescate y limpieza ejecutada por los elementos de diferentes corporaciones de seguridad de todo el estado
- Los hospitales no se daban abasto y tampoco el anfiteatro para recibir los cuerpos, por lo que fue habilitado el gimnasio de la unidad deportiva Miguel Alemán
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