Si bien ignora cuándo, el Presidente de la República tiene al menos una fórmula poco discutible para calcular el término de la eufemística guerra de Calderón:
“El día que tengamos 32 policías estatales confiables…”.
Tiene sentido, y no sólo porque un número indeterminado de policías de todas las entidades federativas alcahuetean bandas criminales o sean muchos los que secuestran, roban y asesinan, sino porque ni siquiera puede hoy hablarse de “32 policías estatales”, pues hay… más de mil 500 corporaciones.
Ayer, apoyándose en lo dicho sobre seguridad por Alejandro Martí en la comida que reunió a “los 300 líderes” de México, Calderón resaltó la paradoja de que, como sucede con la educación pública, “somos profundamente federalistas a la hora de los derechos, pero profundamente centralistas a la hora de los problemas”.
Casi cinco años ha llevado formar la nueva Policía Federal (35 mil efectivos).
Falta por ver en cuánto tiempo garantizan confiabilidad 188 mil 500 policías estatales, 121 mil 519 municipales y cuatro mil 150 afis…
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