Que la fracción del Partido Revolucionario Institucional en la Cámara de Diputados designó una comisión de 15 legisladores, entre ellos a César Augusto Santiago y a Carlos Flores Rico, para rescatar la campaña de su correligionario Manuel Añorve en Guerrero y revertir la desventaja que marcan las encuestas.
La duda de los diputados priistas es por qué Añorve solicitó el apoyo hasta ayer y por qué el dirigente estatal del PRI, Efrén Leyva, rechazó permanentemente el respaldo de la fracción encabezada por Francisco Rojas.
Que, pese a las encuestas, alguien está tan nervioso en el equipo del candidato del Partido de la Revolución Democrática, Ángel Heladio Aguirre, que quiere pasar de última hora la “declaración de un testigo protegido” que vincularía a Añorve con ¡el cártel de los Beltrán Leyva!
Pero ya no hay medio que se vaya con la finta.
Que en el gobierno federal respiraron tranquilos ayer al darse cuenta de que los “malévolos misiles” de WikiLeaks difundidos el domingo ya no tienen ni de lejos la fuerza de hace un par de meses.
Que de muy buen humor, pese a las noticias, y antes de reunirse en privado con la secretaria de Estado de EU, Hillary Clinton, el presidente Calderón encabezó la comida de la comunidad mexicano-libanesa.
Relajado, prolongó su discurso por más de media hora, y dijo que ya le paraba porque “me están sacando la tarjeta amarilla”.
Que en la reunión de apoyo de los senadores perredistas a Ángel Heladio Aguirre se hizo el aparecido el ex presidente municipal de Acapulco, Félix Salgado Macedonio, a quienes algunos asistentes le comentaron en plan de broma: “Sobreviviste a Los Zetas y a La Familia”, a lo que respondió: “Pero a la familia de Zeferino Torreblanca”.(…)
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