Que, contrario a la tradición, el embajador de Estados Unidos, Carlos Pascual, no acudió a la inauguración de, ni más ni menos, la convención de la American Chambers.
Pascual programó una gira a Ciudad Juárez, pero quedó claro que no podía encontrarse en el mismo acto con el presidente Calderón, estando tan frescas las críticas que le ha hecho, aquí y en Washington, por sus “infidencias”, balconeadas por WikiLeaks.
El embajador aparecerá hasta hoy en una conferencia.
Que en los círculos judiciales del Distrito Federal se cruzan apuestas sobre el monto que podría alcanzar la reparación por daño moral a Víctor Daniel Reyes, el hombre que promovió la suspensión provisional de Presunto culpable, y cuyo rostro deberá ser bloqueado en la película.
Se dice que los abogados de Reyes no pedirán una cantidad, ya que en caso de perder el juicio tendrían que pagar 4 por ciento de costas. La decisión recaería entonces en el juzgador.
Así es que, de ahora en adelante, peso que entre a taquilla, peso que podría engrosar la suma reclamada por daño moral.
Que ¿quién los entiende? Mientras el Partido de la Revolución Democrática del Estado de México denuncia que el equipo de Enrique Peña Nieto sacará gente a votar el domingo contra la eventual alianza opositora, otros perredistas dicen tener grabaciones del propio gobernador, quien los llama a no acudir a la consulta.
¡O estará haciendo ambas maniobras en simultáneo!
Que los diputados federales de Acción Nacional sacaron de su chistera una propuesta para crear la “comisión especial para investigar la complicidad de los gobiernos del PRI con el narcotráfico, de acuerdo con las declaraciones de Sócrates Rizzo, ex gobernador de Nuevo León”.(…)
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